Medellín, 12 de diciembre de 2024
Un día lleno de esperanza y magia se vivió este miércoles en Medellín, gracias a la
iniciativa de la empresa Helistar Aviación y Alianza Compromiso de Corazón, quienes,
en colaboración con diversas fundaciones que apoyan a niños en situación de
vulnerabilidad en la capital antioqueña, brindaron a 30 pequeños, entre 4 y 15 años,
la oportunidad de cumplir uno de sus sueños más esperados: volar en helicóptero.
La actividad, titulada “Caravana de la Alegría: Sueño Cumplido”, no solo permitió a
los niños experimentar la emoción de surcar los cielos, sino que también les ofreció un
respiro de alegría en medio de sus luchas diarias. En esta jornada, los pequeños, que
enfrentan difíciles condiciones sociales, vivieron una experiencia única que les permitió
soñar por un momento sin límites.
“Estoy muy emocionada. Yo jamás pensé que mi niña pudiera cumplir este sueño, vernos
hoy aquí es increíble, no ha sido fácil llevar la situación de su salud, pero cuando surgió
esta oportunidad hice todo para que ella pudiera vivir esta experiencia tan bonita”
Manifestó Yuly Mazo, la mamá de Priscila Tapia, de 5 años.
El vuelo partió desde Medellín y tuvo como destino el municipio de Guatapé. Durante la
caravana los niños miembros de la Fundación Eudes, Fundación con Amor por Amor, la
Corporación Mirada de Medellín y la Fundación Dame la Mano, sobrevolaron la ciudad
entre sonrisas y emociones, navegaron por el embalse y realizaron un ascenso a la
famosa Piedra del Peñón, apoyados por miembros de la Fuerza Pública y la Defensa Civil,
quienes aseguraron su bienestar durante el trayecto hacia la cima.
Uno de los momentos más emotivos de la actividad fue la imposición a cada niño de
las “Alas de Vuelo” por parte de la tripulación de Helistar, un gesto simbólico para
recordarles que vale la pena soñar y que los sueños si se hacen realidad.
En el marco de la actividad Helistar invitó a la empresa privada a unirse a proyectos
como este. “La aviación no solo conecta destinos, sino también corazones. Este evento
demuestra que la generosidad y el compromiso social pueden transformar realidades,
incluso en los momentos más difíciles”. Afirmó Adriana Valero, directora médica.
El evento dejó huellas profundas en los corazones de los niños y de todos los
involucrados, demostrando que, cuando los sueños se comparten, pueden volar más
alto que nunca.